La bancarización como catalizador de crecimiento económico

Opinion06-07-2017

Al margen de la retadora coyuntura que enfrenta la economía colombiana, las discusiones enfocadas en el largo plazo ganan cada vez más relevancia. En la búsqueda de factores que puedan elevar el crecimiento potencial del país a niveles del 4% o incluso superiores, suele hacerse referencia al posconflicto, al crecimiento de la inversión extranjera, al fortalecimiento del capital humano, a incentivar la innovación y a elevar la productividad. Sin embargo, poco se habla de bancarización.

Más allá de centrarnos en la cantidad de colombianos que hacen parte del sistema financiero, que de acuerdo con la Banca de las Oportunidades ronda el 77%, modelamos la relación que existe entre la bancarización y el crecimiento económico de nuestro país.

Para esto seguimos la metodología expuesta en un documento del Banco de la República¹, a partir de la cual construimos dos indicadores de bancarización: uno de cobertura, que toma saldos en cuentas de ahorro, cuentas corrientes, depósitos y cartera bruta; y otro de intensidad que recoge información de la cantidad de oficinas bancarias, corresponsales bancarios y empleados del sistema como proporción de la población.

Los hallazgos de este ejercicio nos sugieren resultados que pueden enriquecer la discusión alrededor de las posibles fuentes para dinamizar el crecimiento en el largo plazo. En primer lugar, los avances en bancarización (cobertura) resultan relevantes para explicar el crecimiento del PIB, alcanzando su mayor impacto a los 9 meses. En particular, algunos de los componentes de la demanda como el consumo de los hogares, la formación bruta de capital fijo y la compra de bienes durables, son los que muestran una relación más fuerte. Por su parte, frente a las actividades productivas, el mayor efecto se observa en el sector de la construcción.

Entre tanto, la métrica de intensidad no evidencia una relación significativa con el crecimiento económico. Estos resultados son consecuentes con el vuelco que ha dado el sector financiero en los últimos años hacia la banca digital, que reduce los costos de transacción y facilita el acceso a los servicios financieros.

Si a lo anterior le sumamos la evidencia de una fuerte correlación entre crecimiento potencial de la economía y bancarización, se ratifica la importancia de seguir impulsando la utilización de productos financieros como dinamizador del crecimiento en tiempos en que la inversión ha mermado, la participación de la fuerza laboral se ha reducido y la evolución futura de la productividad luce incierta.

¹ Capera, L., & González, A. (2011). Un índice de Bancarización para Colombia. Reporte de estabilidad Financiera, vol(64).

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